Phil Ivey y Cheung Yin Sun consiguieron llamar la atención de millones de personas cuando Ivey admitió haber usado el método edge sorting para clasificar cartas según los bordes en el Crockfords Casino en Londres en 2012. Como seguramente sabrás, en octubre de 2014, Ivey perdió la demanda que tenía puesta para recuperar sus 12 $ millones que había ganado en el Crockfords. Posteriormente, Ivey fue demandado por el casino Borgata por una cantidad de 9 $ millones. Ivey estaba decidido a utilizar el método edge sorting con Sun en el Borgata. Ivey y Sun ganaron 9 $ millones usando esta técnica. El caso aún está en los tribunales. El 2 de junio de 2015, Cheung Sun perdió la posibilidad de recuperar los 1,1 $ millones que le había confiscado el Foxwoods Casino en 2011, después de que se estableciera que había utilizado el método edge sorting.
Últimamente, el edge sorting no está de suerte en los tribunales. Quizás una mejor manera de decirlo es que a Phil Ivey y Cheung Sun no les está yendo bien en los tribunales. Conozco muchas denuncias de edge sorting que no se procesaron en un tribunal. Los AP tienen que mantener sus ganancias sin una batalla legal (a continuación, te muestro una de esas historias). Pero cuando se trata de «millones», las personas se toman muy en serio estas cosas...
Para obtener más información sobre Phil Ivey y el edge sorting, recomiendo consultar estas publicaciones:
- Phil Ivey -v- Crockfords
- Podcast en Bluff.com sobre Phil Ivey
- Phil Ivey y la prensa amarilla
- Vencer al casino: Desde Affleck hasta Ivey
La siguiente historia habla sobre mi primera experiencia real como asesor con el edge sorting ... resulta que se trataba del equipo de Cheung Sun.
Hace unos tres años estaba jugando al blackjack de dos barajas en un gran casino fuera de la Strip de Las Vegas. De acuerdo, lo admito, estaba contando cartas. Pero, sinceramente, solo estaba pasando el tiempo mientras esperaba a alguien con quien había quedado para cenar. Y además, es difícil no contar cuando juego. Con una apuesta mínima de 5 $ y una apuesta máxima de 40 $, no era una presencia amenazante. Mi sueldo por hora con esta actividad era de 8 $ a 10 $ en un buen día. Pero en este momento de mi carrera, no era una sorpresa, de hecho era vergonzoso, cuando rápidamente me dieron un toque en el hombro.
Me volví y un hombre bien vestido se presentó como el responsable de la sala de los juegos de mesa. Me dijo «Dr. Jacobson, sabemos quién es. ¿Qué está haciendo?» Era una pregunta embarazosa y se sentía claramente incómodo mientras la hacía. Yo también me sentía avergonzado. Cuando me levanté de la mesa, mantuvimos una conversación informal que nos dejó sin aliento. Estuvimos hablando de cuestiones de seguridad de una manera general, y poco a poco nos enfocamos en problemas más grandes. Yo le pregunté: «Si existe alguna cosa en la que pueda ayudarle aquí, cualquier problema de seguridad que no pueda resolver, dígamelo y le daré mi opinión».
Lo que sucedió después fue aún más sorprendente. El responsable de la sala me explicó, que un equipo que se dedicaba a marcar las cartas, había timado al casino unos meses atrás. Me dijo: «Parece que conocen las cartas cuando juegan». Pero, como me explicó, el casino había examinado cuidadosamente las barajas una y otra vez y no habían encontrado indicios de las marcas que el equipo estaba dejando. Estaba seguro de que estaban marcando las cartas, pero no había marcas. ¿Cómo es posible?
Le pedí que me mostrara una baraja de cartas. Me hizo un gesto para que lo acompañara a una mesa en una mesa cerrado y sacó una baraja nueva. La carta que se muestra a continuación es la que usa otro casino de Las Vegas, pero se parece mucho a la que yo vi. La característica más llamativa de esta carta es que es asimétrica. Dos bordes contiguos de las cartas tienen claramente una forma azul de medio diamante, mientras que los otros dos bordes tienen claramente una forma azul de diamante completo. Y cada carta de cada baraja tenía esta característica.
El hecho de que el diseño sea asimétrico permite rotar las cartas mediante un equipo de selección de bordes. Este método funciona a través de una mesa está ocupada por jugadores que trabajan juntos para girar las cartas y ayudar a leer sus valores antes de repartirlas. Ciertas cartas se giran para tener los diamantes completos en los bordes superior e inferior, mientras que otras se giran para tener los diamantes completos en los bordes inferior y izquierdo. Por ejemplo, en el blackjack, los ases y las cartas que valen diez se pueden girar en una dirección, mientras que todas las demás se giran en la otra dirección, lo que permite a los jugadores leer la siguiente carta del crupier. Evidentemente, las cartas se van a mezclar, pero el equipo continúa clasificando todas las manos, y después de algunos cambios, la mayoría de las cartas se podrán clasificar. El hecho de que el casino maneje, recolecte y baraje las cartas de acuerdo con procedimientos estrictos es su talón de Aquiles.
Le dije al responsable del salón: «Una solución fácil es no cortar las cartas cuando barajas. Cortas las cartas una vez, ¿verdad?» Su rostro mostraba un tono de blanco que hasta el corderito de Mary se pondría celoso y confesó que no cortaban las cartas al barajar. Habían pasado meses investigando la forma en que el equipo marcaba sus cartas, mientras que las cartas utilizadas ya se habían marcado con anterioridad. El equipo utilizaba los procedimientos y el material del casino contra ellos. Después de unos minutos asimilándolo todo lo ocurrido, mi nuevo mejor amigo me dijo que seguiríamos en contacto y me dio su tarjeta. No hace falta decir que nunca más volví saber de él.
No estoy diciendo que los casinos que usan este tipo de cartas estén cometiendo un error en la elección del producto. Las cartas que se pueden clasificar según los bordes se utilizan de forma generalizada. Examinando mi propia colección de aproximadamente 50 barajas de varios casinos, más de dos tercios de ellas se pueden clasificarse según el borde. La solución es entender esta laguna en el plano de la seguridad de este tipo de materiales y tratar de solucionarlo. Cada vez que se barajan las cartas, ya sea con una sola baraja, dos barajas o en el dispensador, se debe incluir un corte. Asimismo, cualquier juego que use un barajador automático debe incluir un corte de cartas manual entre rondas. El material que se utilizaba no era el problema: era el procedimiento para usar el equipo lo que fallaba.
Hace poco estuve visitando un casino que usaba unas cartas que tenían el problema del edge sorting. Observé como barajaban en el blackjack, y efectivamente, se cortaba la baraja una vez. Luego le pregunté a un supervisor de mesa por qué al barajar se cortaban las cartas. La respuesta era correcta: «De este modo las cartas no se pueden identificar según el patrón de la parte posterior». Luego me dirigí a la zona nueva, donde se usaban barajadores automáticos, y observé que no se cortaban las cartas. Es evidente, que alguien de la dirección del casino comprendió que hacía falta cortar las cartas al barajar y ese mensaje se transmitió a las políticas y procedimientos del salón principal. Pero, al igual que muchos casinos, no se tomaron en serio la protección en sus juegos nuevos. No es una buena idea.
La lección que aprendemos aquí es que nada se puede dar por sentado en la protección de juegos. A menudo, los problemas son pequeños y se pueden corregir rápidamente. Pero a menos que conozcas el problema y la solución, te puedes pasar meses preguntándote qué hacen y cómo lo hacen. La persistencia no siempre es la respuesta para resolver un problema.
